La Desconexión de Boca Bajo el Mandato de Fernando Gago
La situación actual del Club Atlético Boca Juniors es difícil de asimilar para sus aficionados. Tras el debut de Fernando Gago como entrenador, el equipo ha mostrado un rendimiento muy por debajo de las expectativas. En su último encuentro, el conjunto Xeneize se presentó desarmado y desconectado, lo que generó preocupación entre los seguidores.
Un Rendimiento Preocupante
El rendimiento de varios jugadores ha sido motivo de preocupación, especialmente el de Ignacio Miramón, quien es considerado una pieza clave para el funcionamiento del equipo. Sin embargo, en el partido en Victoria, el defensor no presentó su mejor nivel. Esto se evidenció en una jugada crucial en la que Blas Armoa, delantero del Tigre, casi capitaliza una oportunidad que habría puesto el marcador 2-0 a favor de su equipo, si no fuese por la intervención del árbitro, Fernando Echenique, quien anuló el gol por un fuera de juego discutido.
Un Primer Tiempo Desastroso
El primer tiempo de Boca fue una muestra clara de la desconexión dentro del plantel. El equipo, bajo el mando de Gago, parecía carecer de asociación y coordinación. En varias etapas del partido, la línea defensiva fue expuesta, dejando espacios amplios que el Tigre supo aprovechar. La situación se tornó más grave cuando Blas Armoa, quien ingresó por un lesionado Florián Monzón, sorprendió a la defensa de Boca, especialmente a Marcos Rojo, quien no logró marcarlo adecuadamente.
La Polémica del Gol Anulado
La anulación del gol de Armoa fue un tema de controversia. Aunque se argumentó que el delantero estaba en fuera de juego antes de recibir el balón, muchos aficionados del Tigre creyeron que la decisión fue errónea, ya que Armoa se había reposicionado en una zona válida para convertir. Este tipo de decisiones arbitrales suelen generar una gran discusión, y en este caso, no fue la excepción.
En conclusión, el inicio de Fernando Gago como entrenador ha sido torcido por la falta de cohesión en su equipo. La afición espera ver pronto cambios en el rendimiento y una mejor adaptación entre los jugadores, para que el Xeneize pueda volver a luchar por los objetivos que le son propios.